Funcionales, probióticos, ricos en… Con aporte extra de… Son sólo algunos de los calificativos utilizados en los lineales de alimentación y tiendas especializadas para presentar los distintos productos que salen al mercado. El objetivo de todos ellos es ofrecer ese plus diferencial que lo hace mejor que la versión anterior y que le otorga una nueva capacidad para generar mayores beneficios a nuestro organismo.
Alimentos más sanos y saludables
El consumidor es cada vez más consciente de la demostrada relación entre salud y alimentación. Por eso exige más en su camino hacia hábitos de consumo más saludables. El porcentaje de población que cuida al máximo lo que come o, al menos, lo que compra, se incrementa año a año. La población se decanta progresivamente por alimentos más sanos, más saludables, más naturales y menos contaminados.
La industria alimentaria lo sabe. De ahí su apuesta por la innovación constante, con especial atención a procesos que puedan conseguir no sólo nuevos productos finales, sino también propuestas más saludables y personalizables. Opciones novedosas que den al consumidor la posibilidad de ir combinando distintos productos o ingredientes que, introducidos en formas distintas en su día a día, mejoren su sistema vital e inmunológico, le ayuden en el mantenimiento de su sistema óseo o a mejorar su salud cardiovascular.
Los estudios demuestran que no solo debemos tener una alimentación más natural y saludable, sino que también es necesario analizar nuestra genética y la actividad diaria que desarrollamos para que esos alimentos nos aporten los nutrientes que realmente necesitamos y no hagamos ni un uso excesivo ni nos quedemos por debajo. Hoy sabemos que no todo el mundo absorbe y metaboliza de la misma forma. Por ese camino van las investigaciones de muchas de las industrias alimentarias: crear productos que puedan tener distintas aplicaciones en nuestra dieta.
InLeit: rendimiento nutricional
Desde InLeit apostamos decididamente por esa I+D para que la proteína láctea que producimos sea la base y protagonista de gran parte de esa nueva generación de productos funcionales. Y es que la proteína es uno de los mejores ingredientes para conseguirlo. Por eso, estamos convencidos de que las distintas aplicaciones de nuestra proteína láctea (caseína micelar, de suero de leche soluble, baja en de esporas…) serán una excelente base para esas nuevas fórmulas dietéticas.
Son varios los ámbitos donde esa funcionalidad juega un papel clave para conseguir un mejor rendimiento nutricional: el deporte, especialmente el de alto rendimiento; la alimentación infantil, concretamente la destinada a los bebés; la gama senior, con un apartado específico para las mujeres por los beneficios que puede aportar en la lucha contra la osteoporosis y en la reducción de los efectos de la menopausia… Todo ello sin olvidar las múltiples aplicaciones en la obtención de productos gourmet. Por ello, desde aquí, y a lo largo de las próximas semanas, iremos desgranando los beneficios que nuestros derivados de la proteína pueden aportar a cada uno de estos colectivos.
